Historia y Educación

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Como saben la mayoría del contenido de Historia y Educación está atravesado por la comprensión del tiempo y del espacio. Bueno, hace tiempo, mientras armaba uno de los talleres, investigué mucho sobre el origen de elementos que ayudan a medir y acompañan la materialidad de estos conceptos tan abstractos.

Uno de ellos fue la brújula, comencé mi búsqueda convencida de lo que me habían enseñado en la escuela, que los Europeos la habían inventado entre el siglo XIII y el XVI. Pero la cuestión es que llegué a conocer que hubo antecedentes previos en el IMPERIO MONGOL (Antiguo imperio de lo que hoy conocemos como China)

El origen de la brújula está asociado necesariamente al descubrimiento de la magnética. Sin embargo, la relación entre el comportamiento de la agujas de una brújula y el magnetismo de la tierra demoró en descubrirse, a tal punto que inicialmente se pensaba que las agujas se movían por una especie de fuerza mágica o sobrenatural, de allí su nombre, como derivado de “bruja” o “brujería”.

Una cosa es el invento del elemento, y otra el proceso de su historicidad como elemento de orientación, es por eso que aquí pueden prestarse a confusión los roles de cada uno de los territorios. Por eso, vamos a ampliar un poquito más.

La primera descripción en documentos históricos que data la idea de la creación de un artilugio que marcaba una dirección, según Needham (1977) -un estudioso de la ciencia China- es el “tablero de adivinador”.

Así se le llamaba a un elemento que se utilizaba entre el siglo I a.C. y siglo I d.C en la antigua China. Consistía en una lámina cuadrada, que en medio tenía una cuchara de piedra imán (shao) que indicaba el sur.

Ahora bien, el uso de la brújula como instrumento de orientación en navegación marítima en China comenzó a utilizarse entre los años 850 y 1050 (Robert Temple,1987. En Mecías 2008)

Se trataba de brújulas de aguja flotante o pivotante, que indicaban una dirección. Colocaban una astilla de “magnetita”, un mineral de hierro con propiedades magnéticas, flotando en una vasija con agua. El problema de esto es que solo funcionaba en aguas calmas, por lo que muchas veces no cumplía su función.

¡Ahora sí! lo que se inventa en Europa en siglo XIII es la brújula seca para uso náutico, colocando la aguja sobre un eje pivotante en una caja sin agua. Se piensa que, probablemente, el uso de la aguja imantada llegó a Europa a través de la ruta de la seda, a finales del siglo XII.

Es probable que las confusiones discursivas tengan que ver con la historia del magnetismo en sí, ya que en la Antigua Grecia se iniciaban las investigaciones sobre ciertos fenómenos magnéticos sin poderlos explicar desde la lógica. Hay documentos en donde los griegos ya describían el poder de atracción de la «piedra de Magnesia», este imán natural que proviene de Grecia continental, pero no había explicación científica.

Tales de Mileto (siglo VI a.C.), no es capaz de explicar los fenómenos de atracción magnética por causas físicas, prefiere dar un alma a esta piedra capaz de «mover el hierro». Esto refiere a esta creencia de verlo como “artilugio” que hablábamos antes y que también se comparte con la antigua China.

Para los especialistas, la creencia mágica del instrumento, explica que “su inicio” en los discursos históricos científicos se haya demorado hasta coincidir con los conocimientos científicos del magnetismo. No es hasta el 1600, cuando el inglés William Gilbert emite la hipótesis del geomagnetismo, para explicar las propiedades de la aguja imantada.

Y porque seguramente no todos nacimos sabiendo de qué se trata esto del magnetismo, al menos mencionaré básicamente que: la tierra está rodeada por un gran campo magnético, las agujas de la brújula están hechas de un material sumamente sensible al movimiento y, la atracción de ese campo magnético, hace que siempre apunten al norte. A partir de esto se explica que el norte geográfico no es el mismo que el norte magnético. La cartografía es otra construcción humana, y de esto te cuento en “El ojo crítico” al final de la News Letter.

Volviendo a la brújula, a partir del siglo XVII con los avances de la ciencia, fue evolucionando en formas y precisión hasta conformarse en la que conocemos hoy. Aunque ya deberíamos estar investigando en el paso de la brújula al GPS.

PARA IR MÁS ALLÁ DE LA ANÉCDOTA…

Mas allá de lo interesante de la curiosidaded de este invento, me parece interesante reflexionar sobre algunas cuestiones que este proceso deja entorno a la enseñanza de la Historia, más allá de la anécdota.

En primer lugar la importancia de entender que cuando hablamos de épocas tan antiguas, el trabajo de reconstrucción desde la documentación histórica se vuelve más complejo. Pensemos que había poblaciones habitando todos los continentes, y muchas veces resulta hasta intrigante ver cómo los mismos cuestionamientos y la búsqueda de soluciones a problemas similares, conviven en sociedades que no se comunicaban entre sí. De hecho hay datos de que en Mesoamérica los mayas también investigaban y avanzaban en conocimientos sobre magnetismo desde antes de la llegada de los españoles. Por eso, cuando se trata de elementos o anécdotas puntuales no compres la historia de una, problematicemos, investiguemos, averigüemos.

No es casual que en mi escuela el origen haya sido el europeo. Si bien vimos que Europa tuvo gran protagonismo en una parte de la historia, lo cierto es que nuestra educación está atravesada por la mirada eurocéntrica. Estoy segura que si hoy les pregunto sobre la Historia de Alemania o la Historia de China, muchos tendrían más elementos para indagar sobre la primera. Esto vale también para la historia Latinoamericana, aunque es cierto, que luego de muchos debates desde nuestro sistema educativo, gana terreno de a poco en los manuales escolares.

Por último, todo invento aparece, generalmente, de la mano de una necesidad. Es probable que el origen de la brújula haya tenido funciones místicas, pero fue el puntapié para estudiar las propiedades del imán, que frente a la necesidad de abrir nuevos mercados y buscar nuevas colonias, dan lugar a este artefacto perfeccionado. Por eso, cuando nos interesemos por estos inventos siempre preguntémonos ¿Qué estaba pasando en el contexto? ¿qué demandaba la sociedad? ¿a quién benefició?

¿CÓMO CITAR ESTE MATERIAL?

Armas, MC. (2023). MADE IN CHINA. Una brújula para la brújula. Sección Newsletter MARZO 2023 – Sólo para curiosos. En web: https://historiayeducacion.com/ (Y fecha en que has consultado la web)

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